[Interior] Mezcla ecléctica bajo paredes de ladrillo
Ubicado en el centro de la ciudad de St Louis, Missouri, el loft de Joe, Kelly y su perro Dakota, está en un edificio construido en 1906 de cinco pisos, transformado en una especie de condominio de 8 lofts que preserva todo su carácter industrial con las paredes de ladrillo visto, los techos de vigas de madera recuperadas y las instalaciones a la vista… Con el fin de cuidar la intimidad de cada uno, está diseñado con medias paredes, separando sin cerrar completamente los espacios y jugando con las alturas. Una paleta de base en blanco y una estructura de ladrillo que crea la arquitectura de esta joya de edificio donde la pareja compró todos los nuevos muebles y obras de arte. Combinados con los nuevos accesorios, ligeros, el loft terminado es una mezcla ecléctica del estilo contemporáneo, moderno e industrial con un esquema gris, blanco y anaranjado ideal.
Un ascensor desde el vestíbulo, lleva a los propietarios e invitados directamente a la unidad del loft. Saliendo del ascensor, son recibidos por un amplio bar formado por tres mesas de madera con patas de metal. Por encima de la barra hay una foto impresionante de Central Park que Joe sabía que tenía que tener tan pronto como la viera. Justo al lado de la entrada se sitúa la cocina y el comedor combinados. En la cocina, Kelly y Joe pintaron los gabinetes de los muebles en negro, un color audaz que destaca sobre el azulejo con acentos en negro y gris y la encimera de granito. Las lámparas suspendidas de cobre cuelgan sobre la isla expansiva con taburetes del alambre que le añade un elemento de textura diferente a tanta madera y ladrillo. Ya que la isla de la cocina es tan grande, necesitaban una mesa lo suficientemente grande como para complementar el tamaño del espacio en sí para el comedor y la mesa es un elemento realizado por ellos mismos con vigas recuperadas de un granero de hace 120 años. Un pequeño rincón de la biblioteca está al lado de la cocina abierta, el comedor y de la sala de estar. Kelly y Joe instalaron las estanterías de metal-tuberías que exhiben baratijas personales y accesorios. El metal es un contraste agradable a la pared de ladrillo expuesta. Una pintura en blanco y negro del artista local Ian Quattrocchi asienta el espacio. En el techo, el sistema de polea original para el elevador de carga original del edificio, agrega un toque fresco e industrial.
El salón contiguo es el epítome de elegante y contemporáneo y demuestra que el aspecto moderno puede ser acogedor y fresco al mismo tiempo. Un sofá de color gris paloma y sillas tipo ‘huevo’ en color crema salpicado de color por los cojines de color naranja, continúan el esquema gris, blanco y naranja del desván. La pared del dormitorio de invitados tenía que ser audaz y visualmente interesante, así que seleccionaron un papel pintado hexagonal en blanco y negro que es ideal. El dormitorio principal cuenta con una cabecera tapizada de azul marino y una lámpara de araña en contraste. Un espacio muy interesante ¿no os parece?
¡Feliz día a todos!
Fotografías [ ] St.Louis Homes Mag
