[Industrial] Garaje reconvertido en loft
Ya conocéis mi debilidad por las viviendas de estilo industrial y esta que os traigo es un garaje reconvertido en un loft lleno de personalidad. Eclecticismo en un interior que incorpora elementos vintage y piezas de diseño, en un perfecto estilo industrial. Al acercarnos a este interior descubrimos que al ser un garaje, tiene escasez de entrada de luz natural. El estudio Bricks Amsterdam firma la reforma íntegra del espacio que utiliza la luz cenital para iluminar el espacio a través de cerramientos de vidrio y metal. Un verdadero ejercicio de buen gusto y estilo loft industrial con toques vintage como el mapa antiguo a modo de cabecero, las butacas de madera de los dormitorios y el marcado aire masculino de todo el ambiente. Toda la estructura y arquitectura, así como la decoración cuenta como elemento fundamental el preservar el espíritu de la construcción original, por lo que se ha optado por conducciones y paredes vistas, suelos de cemento, carpintería metálica, paleta de colores apagados, combinados con muebles de corte industrial vintage, casi todos adquiridos en tiendas de segunda mano.
La zona social parte de un espacio abierto donde compartir en la cocina, comedor o el salón, con los sobrios sillones de cuero envejecido, el juego de arte y láminas en las paredes en contraste con la delicada alfombra, de estilo clásico, en el centro. El solado de microcemento unifica todas las estancias y todos los espacios se comunican mediante cerramientos metálicos de hierro y vidrio, que amplian visualmente la sensación espacial, y aligeran la rotundidad del diseño en general. Con el garaje completamente integrado con el resto de la casa, en el espacio conviven su coche y la moto junto con el resto del mobiliario, como si de piezas de museo se trataran. Aprovechando la altura de los techos y la uniforme textura y color en las paredes, su propietario ha querido imprimir la esencia de los loft neoyorquinos así como el espíritu fabril a este antiguo local.
Un interior en perfecto estilo masculino e industrial, cálido y lleno de piezas llenas de historia, que resulta cálido y acogedor. Gran parte de los muebles han sido diseñados o recuperados intentando conservar la pátina del paso de los años. Recurre a menudo a objetos cotidianos como cajas de madera o palets para fabricar desde la estructura de una cama a mesas supletorias, todo ello integrado en un ambiente masculino y asombrosamente acogedor.n ¡Me encanta! ¿Y a vosotros?
Fotografías Bricks Amsterdam via Desire to Inspire