Espacioso y vibrante, este loft sería ¡mi casa perfecta!. Llena de luz, techos altos, materiales fabriles como el hormigón y el ladrillo, y mucho estilo industrial, este proyecto de loft parte de un espacio social completamente abierto y comunicado donde la cocina, el comedor, el salón comparten espacio. Como si de una nave se tratara, el techo a dos aguas se complementa con lucernarios que hacen que la luz penetre y bañe todo el espacio. Los muros de ladrillo visto en la cocina acentúan la calidez de la madera de todo el mobiliario, jugando con las lámparas industriales, la carpintería metálica en negro que permite el paso de la luz… La cocina es ¡increíble!, simplemente perfecto.